Los antioxidantes son moléculas producidas principalmente por plantas en sus diferentes estructuras como hojas, frutos y raíces, que una vez consumidas por el ser humano funcionan como agentes protectores naturales de nuestras células y tejidos.

Hay tres principales tipos de antioxidantes presentes en los alimentos: primero están las vitaminas, de las más conocidas se encuentran el ácido ascórbico o vitamina C y el alfatocoferol o vitamina E, ampliamente reconocidas y presentes en muchos alimentos como los cítricos y las semillas respectivamente. Después tenemos a la familia de los carotenoides, que en muchas ocasiones son los responsables de dar su característico color amarillo, naranja, rojo o morado a las frutas como por ejemplo a la zanahoria, el jitomate, la zarzamora, etc. Finalmente encontramos a la gran familia de los polifenoles que son moléculas muy variadas pero que, además de ser antioxidantes tienen un efecto quelante, es decir, que atrapan toxinas para desecharlas. Los polifenoles están muy presentes en bebidas como el café, el vino y el té.

En el mundo de hoy en día nuestras células están sometidas a mucho estrés por radicales libres, tanto de forma natural como el ambiente en el que vivimos. Estos radicales libres provocan que las células puedan llegar a sufrir daños que aceleren el envejecimiento o enfermedades degenerativas como el cáncer. Los antioxidantes se encargan de neutralizar estos radicales libres prolongando así nuestra juventud y frenando la aparición de enfermedades.

Te invitamos a agregar a tu dieta más productos que contengan antioxidantes como frutas y verduras, así como bebidas como jugos o té. Zaaté® con su línea ANTEAOX es un perfecto aliado para aprovechar los antioxidantes del té junto con los de los arándanos en una deliciosa bebida que además de cuidarte te encantará.